– Eso lo he sentido muchas veces. Dependo de todo para sentirme bien. De mi pareja, de mi trabajo, del dinero, de la opinión de otros…
– Exacto. Lo externo es lo que le da sentido a tu vida. Y date cuenta de esto: lo externo es muy frágil, cambia todo el tiempo y tarde o temprano se acaba. De ahí vienen la angustia, la codependencia y el abandono de ti mismo.
– Como no hay nada dentro de mí que me haga sentir valioso y digno de amor, busco afuera algo o alguien que me haga sentir bien acerca de mí mismo.
– Vivir sin centro es abandonarte todo el tiempo, es la obstinada costumbre de buscar afuera algo que llene el vacío interior que sientes. Vivir sin centro tiene serias consecuencias.
– Y las analizaremos a continuación…

– Lo haremos. Para que puedas observarte y cada vez que te descubras en cualquiera de estas actitudes estés consciente de ello.

Continuará…